28 de octubre de 2010

Una excursión a los inicios del MJVC...

Para dar inicio a este relato en el cual describiré como es la ciudad donde tuvo origen el primer retiro del MJVC, les daré antes una breve reseña de cómo y donde nace nuestro Movimiento.
El Movimiento de Jornadas de Vida Cristiana tiene sus inicios en el viejo continente, para se mas preciso en nuestra madre Patria (España), donde activistas de la Acción Católica, para traer devuelta a la gente a nuestra Santa Iglesia crean el Movimiento de Cursillo. Este Movimiento que en principios fue creado para la juventud, con el correr del tiempo se fue transformando en un grupo de gente mayormente adulta, por lo que estos mismos al ver la falta de jóvenes, creyeron necesario crear otro Movimiento que atrajera juventud a la Iglesia a través de un retiro impacto. Dos Sacerdotes, de por ese entonces, emprenden una excursión a México, donde descubren un grupo llamado Jornadas, el cual tenía el carisma que estos dos hombres querían para comenzar con este nuevo Movimiento. He aquí, donde, con las bases del cursillo y el carisma de las Jornadas Mejicanas, se da inicio en una escuela del Distrito Federal al Movimiento de Jornada de Vida Cristiana. El primer retiro impacto se realiza en las afueras de la ciudad de Santiago de Querétaro, ciudad que, en este sencillo relato, tratare de describirles.
Esta ciudad se encuentra en el corazón de México, a unos 200 Km del su Distrito Federal. Su población es de aproximadamente un millón de amables personas. Su clima es cálido, y su geografía esta formada por un valle, rodeadas de algunas pirámides Aztecas que se confunden entre las montañas. Pero lo más impactante de esta ciudad es, su distribución, su cultura y la Fe de su gente.
Como todo país colonizado por España, la distribución de la ciudad esta dada de la siguiente manera: una plaza principal con el palacio de Gobierno y una Iglesia, pero lo característico de este lugar es que esta distribución se repite en todas sus cuadras. Hay muy pocos edificios, la mayoría de sus casas son bajas y de varios colores y con el detalle de tener en sus puertas o en sus techos algún distintivo religioso, ya sea una cruz, la imagen de la Guadalupe o de algún Santo.
Sus plazas son algo hermoso, llena de flores, con glorietas donde los fines de semana, las orquestas son las encargadas de darle la ultima pincelada con su música y los abuelos de la ciudad acompañan el ritmo con sus pasos de Fox y Cha cha cha.
Durante la semana sus Iglesias permanecen abiertas, algunas hasta con adoración al Santísimo desde que sale el Sol hasta que este se pone. Una grata sorpresa me lleve uno de los primeros días en esta ciudad, cuando con mi compañero de trabajo decidimos ir a rezar el Rosario. Entramos en una Iglesia, la cual resulto ser basílica y llevaba el nombre de la madre de América, GUADALUPE. En ese momento estaba por empezar el rezo del santo Rosario, y mientras les relato este hecho se me vienen las imágenes al corazón y me contagio de una mezcla de nostalgia y melancolía. Nunca vi rezarle a nuestra madre con tanto amor y devoción; cada vez que se acababa un misterio, el sacerdote de la basílica repartía a todas las personas una flor y las invitaba a acercarse al cuadro de la virgen puesto por encima del atar y cantarle todos juntos una canción. Les digo amigos, he recorrido muchas Iglesias en esta ciudad y todas contenían una riqueza histórica y una hermosura arquitectónica impresionante, desde los Dominicos y Franciscanos hasta los Salesianos.
Para terminar, les contaré otro hecho que me sucedió y a su vez me sorprendió. Al día siguiente de mi arribo en Querétaro, llegaron las reliquias de San Juan Bosco que están recorriendo todo America; como apasionado por la vida de este Santo, fui a visitarlo al colegio salesiano de la ciudad, y pude ver eso que mi viejo me contaba de chiquito, sentí cómo se vive en la familia salesiana. El carisma y el amor de las miles de personas que se encontraban en ese lugar era inexplicable, a cada rato sonaban sus porras con el clasico… "A la Bin, a la Ban , a la Bin bom Bam, Don Bosco, Don bosco, Ra Ra Ra…!!!"… Amigos, salí de ahí con el espíritu renovado.
Puedo decir que después de este viaje algo nuevo hay en mi. Al conocer otra cultura, el hombre se enriquece, pero si aparte este conoce mas de su Fe, se termina renovando y fortaleciendo, y Querétaro, esa ciudad que no pierde su magia y que por algo Dios la destino a ser la sede de nuestro primer retiro de Jornadas, es fuente de todo eso.
Espero que no los haya aburrido y que les halla contagiado aun que sea en su imaginación un poco de la Alegría que significo para mi conocer este lugar.
Un fuerte abrazo y hasta el próximo viaje si Dios y Mamucha lo permiten.

Javier, J36..