10 de noviembre de 2007

Felíz de Tí que has creído..

Dios nos cruzó, y no fue casualidad. Felices de haber creído, salimos de la Jornada 29; Nancy, Guada y Georgi, las tres empezamos a caminar en nuestro 4º día a la par de Jime (nuestra Auxiliar) que lo venia viviendo hace 3 años.

Paso un tiempo hasta que pudimos realmente fortalecer nuestra RGO. Hoy sabemos lo importante que es para nosotras. Caminamos juntas y aprendimos a valorarla, a cuidarla como un hermoso regalo que Dios nos hizo.
Estamos felices de esta AMISTAD porque es Dios quien esta en medio nuestro.

Compartimos nuestras vidas en los momentos mas lindos, fuimos creciendo juntas, cómplices en los nervios previos a los exámenes finales, para luego celebrar con alegría el logro de habernos recibido; los amores y desamores de nuestras vidas, apuntalándonos en nuestros proyectos cada una desde su punto de vista diferente: Nancy, en su lucha por la igualdad social; Georgi “glamour”, con su carrera o obsesión por los números; Guanda “la profe”, con sus rutinas deportivas y su dieta saludable y Jime, con su amor al arte… Cada una con su vida, diferentes, pero compañeras en un mismo caminar. También pasamos momentos no tan lindos porque en nuestro 4ª día vivimos el dolor, angustia y prueba, pero sabemos que nos tenemos y que contamos con la compañía también desde la Oración.

La RGO hace que vayamos juntas en este dulce camino que nos conduce a Cristo, siempre con los ojos fijos en El y viviéndolo ¡¡De Colores!!
Damos gracias al movimiento por ser parte de nuestra vida y a Dios por habernos cruzado.

Ave María y Adelante...!
De Colores...!

9 de noviembre de 2007

Nuestro Obispo sobre los 30 años del Movimiento..

La Celebración de los 30 años de vida del movimiento de jornadas de vida cristiana en nuestra diócesis se constituye en un motivo de alegría para todos los que formamos parte de esta comunidad porque reconocemos en este movimiento una verdadera gracia, un regalo del Señor para la Iglesia.
Las Jornadas de vida Cristiane les permite a los jóvenes tomar conciencia de un triple encuentro:

Consigo mismo.
Con Dios.
Con los demás.

Partiendo de esta nueva conciencia, el joven asume su compromiso renovado con el Señor en la vida cotidiana, dispuesto a ser fermento del reino en los distintos ámbitos en los que se mueve: La familia, el estudio, el trabajo y su grupo de amigos entre otros. De la Jornada se regresa a los ambientes para alcanzar y transformar, con la fuerza del Evangelio, los criterios de juicio, los valores determinantes, los puntos de interés, las líneas de pensamiento, las fuentes inspiradoras y los modelos de vida de la humanidad que están en contraste con la palabra de Dios y con el designio de salvación (Evangelium Nuntiandi) 

La historia del movimiento reconoce a sus antecedentes en los Cursillos de Cristiandad surgidos a fines de la década de los ´40 en España. Mas tarde en México, se adapta los contenidos y las metodologías a la realidad de los jóvenes dando así origen a las Jornadas de Vida Cristiana.

En Nuestro País, la historia comienza cuando los sacerdotes salesianos Adolfo Ruhl y Adán Recofski viajan con el deseo de conocer el movimiento y traerlo a la Argentina. Finalmente, luego de superar varios obstáculos, realizan en Octubre de 1967 la 1º Jornada para muchachos de Rafael Calzada, Diócesis de Lomas de Zamora. Paulatinamente, en algunas diócesis, el movimiento fue extendiéndose, formando comunidades que han ayudado a vertebrar la vida Cristiana, enriqueciendo a las parroquias y revitalizando a las instituciones, e insertándose en los más variados ambientes.

Desde 1985 el movimiento de Jornadas de Vida Cristiana ha sido reconocido por la Conferencia Episcopal Argentina, siendo uno de los pocos movimientos juveniles reconocidos a nivel nacional.

En nuestra Diócesis, el movimiento nace cuando, luego de haber vivido ellos mismos. Mons. Roberto Toledo y Mons.  José Correira realizan en Octubre de 1977 la 1º Jornada de Vida Cristiana en Avellaneda.

Las Jornadas a lo largo de todos estos años se han revelado como un instrumento privilegiado para la evangelización de la juventud y para el fortalecimiento de nuestras comunidades. Gracias a Dios, han surgido de Jornadas muchas vocaciones para el sacerdocio, de religiosa y consagrada, y se han forjado también matrimonios cristianos que dan testimonio al mundo del amor de Dios en sus familias.

Este trigésimo aniversario encuentra al movimiento de Jornadas abocado a nuevos desafíos. Hoy más que nunca, la juventud quiere y necesita alimentarse de criterios y conductas que tengan fundamento en lo esencial, en lo que tiene verdad y corre un riesgo serio si no lo encuentra. Solo el Señor puede calmar el hambre de plenitud que esta en nuestro corazón. Y cuando los jóvenes no encuentran al Señor, muchas veces encuentra sucedáneos en el abuso de las bebidas alcohólicas, en el actual flagelo de la droga, en un poco gratificante sensacionalismo sin amor, en un consumismo cada vez mas vació o en un activismo afiebrado y superficial. En el fondo, detrás de todas estas actitudes, se trata de huir de uno mismo, de los demás y de Dios Por ello, las Jornadas ofrecen precisamente la posibilidad de un autentico encuentro con Dios, el único capaz de restaurar el equilibrio interno y de dar alegría y esperanzas a nuestras vidas.

De este encuentro nace el asumir de la propia vida como una vocación y una misión.  Si Dios ha iluminado y sigue iluminando, estamos llamados a comunicársela a los demás: A ser signo de esperanza a un mundo que parece olvidarse de Dios.

Queridos Jornadistas: ¡No tengan el miedo de correr este riesgo! ¡Sean misioneros con alegría y la creatividad que brota del amor!

Actualmente el desafió pasa por imbuirse en el espíritu de “Aparecida” para reforzar el espíritu de discípulos y misioneros y para eso necesitamos saber escuchar la palabra de Dios y dialogar con ella, de modo que desde el Evangelio tengamos algo grande que comunicarle a los demás que no solo sean palabras dichas de memoria. El ejemplo mueve mucho que las palabras. Lo mismo sucede con la oración: Solo si ella es el motor de nuestra actividad, de nuestra apostolicidad, nuestra misión podrá dar frutos. Así haremos que la iglesia sea más creíble a los demás, y a los jóvenes en particular.

A Todos los Jornadistas les deseo un muy feliz aniversario, pleno de alegría y de un renovado entusiasmo los bendigo a todos y cada uno de ustedes. Sigan dando razones de la esperanza.   

De Colores!

Mons. Rubén O. Frassia.
Obispo de Avellaneda - Lanus.

8 de noviembre de 2007

Un Jornadista de todos los tiempos..

Carlos es alguien que nos puede contar sobre los inicios del Movimiento en la Diócesis. Es maestro e hizo su Jornada en el año 1974, cuanto tenía 16 años en la Diócesis de Lomas de Zamora,  mas exactamente la Jornada 36 de Rafael Calzada.

¿Cómo llegaste a Jornada? Yo era de la Parroquia San Pedro Armengol de Lanus, daba Catequesis y hacia “un poco de todo” ahí. El Padre párroco de ahi, el Padre Arbegu, me quería mucho y me invito a hacer Jornadas. Así fue como empezó todo. Inmediatamente empecé a formar parte de una Comisión en el Movimiento que se encargaba de difusión del mismo en otras Diócesis. ¿Y saben donde se le ocurrió promocionarlo? Como era vecino vino hacia Avellaneda, se conectó con el Obispo de la Diócesis de ese momento Monseñor Quarraccino. Después encargaría a los sacerdotes Toledo y Correia que vivieran a su Jornada en Lomas de Zamora para luego instalarse aquí.
Tuve la gracia de ser Auxiliar de varios Jornadas de Lomas y en particular de la Jornada nº 43 (de Rafael Calzada) junto con su amigo Rubén Pardo. Jornada que vivieran los sacerdotes Toledo y Correia junto a un grupo de jóvenes que recuerdo muy bien: Horacio Santos, Pireo Palma, Raúl Sertal, Francisco Caprio, Carlos Vacaro y Carlos Grada. Como no recordarlos si junto a ellos y Rubén pardo forme mi RGO.
De esa RGO en 1977, nace el MJVC en Avellaneda. Mucho trabajo, y por sobre todo mucha Oración fue necesario para que ello fuera posible. Recuerdo que las reuniones se hacían en un saloncito de la Parroquia de Nuestra Señora de Loreto, lugar que nos facilitaba el Padre Correia ya que era el párroco de esa parroquia en esos tiempos. Eran larguisimas las reuniones y así se fue afianzando la amistad entre nosotros y a su vez, el movimiento se iba creciendo en su origen.

Nace el primer secretariado ¿Quiénes los conformaban? Y… los jóvenes de esta RGO mas el Padre Toledo y el Padre Correia, incorporándose una mujer, Irene Villano de Vacaro de la “Jornada Cero” (como ella solía decir). Las reuniones de secretariado se hacían en el Obispado.
Se fue gestando de esa manera la preparación de la primera Jornada de varones en Avellaneda. El equipo estaría conformado por nuestros jóvenes, los antes mencionados más los que se sumaron: Carlos Velásquez,  Raúl Riza y todo el equipo de exteriores lo formaban Cursillistas tanto de Avellaneda como de Quilmas.
Pero Claro, En Lomas no hay equipo de exteriores, así que eso aquí fue incorporado por nuestros hermanos Cursillistas. Recuerdo que por sobre todo la unidad que había entre nosotros, entendí que fue muy importante esa modificación en nuestra Diócesis. En cuanto a los Rodajes, se realizaban en Lomas, incorporándose aquí el equipo de exteriores. Creo que esta era la unica Diócesis en la que el MJVC tenía equipo de exteriores.

¿Cómo era el rodaje? Y…Como ahora los de ustedes. Nos preparamos, nosotros con las charlas, que tenían una impronta de las charlas de Cursillo, y los exteriores; las tarjetas, los mantelitos y demás, que fue todo traído por los hermanos Cursillistas.

¿De donde salieron los candidatos a la primera Jornada? ¡¡¡Había que llegar a 30!!! La mayoría eran hijos de cursillistas. La llamamos la jornada “de la selva” porque la vivieron “chicos de todos  lados y de toda clase”. Recuerdo que la mayoría no era de parroquia.
Y así fue como se realizo en Octubre de 1977 la primera jornada de varones de Avellaneda en la casa “madre del silencio” de Wilde, con un promedio de 30 chicos aproximadamente, su animador fue Horacio Santos y yo recuerdo esa jornada mas mía que la mía que viví.

Claro, la viviste dándote.. Si y uno de los momentos mas inolvidables fue después de la charla de García, después del rollo, en el Sagrario. Fue muy fuerte, muy profundo para todos, tanto para los chicos como para los auxiliares.
La primera ultreya se realizo en el salón “Okey” (hoy se llama José Frassinetti) de la parroquia Ntra. Sra. De Loreto. Todos estaban, no falto ni uno, se realizaban todos los viernes.
 Bueno…y después vino la primera jornada de mujeres. Pero no había auxiliares…así que un grupo de chicas fueron a vivir su jornada en Lomas, entre ellas estaban; Maria del Carmen Santos, Liliana Yansen y Cristina Galilianes. Quienes después junto con Graciela Capiro serian las auxiliares de la primera jornada de mujeres.
Más adelante se realizo la primer pre-escuela, era necesario formar a los jornadistas así que después de las ultreyas se realizaban cada quince días y cada quince días, la pre-escuela. De este modo se realizaban también la primera jornada metodologica que fue dada por jornadistas de Lomas, creo que fuimos casi todos.
Y así una y otra.. Y mas Jornadas hasta llegar a cumplir 30 años.. ¡¡Porque ellos no han podido callar lo que han visto y oído!!

7 de noviembre de 2007

Simplemente... Gracias Señor!

Sin dudas, Dios, en la fidelidad de su Amor que no cambia, ha inspirado el camino de las Jornadas de Vida Cristiana. Se cumplen 30 años de testimonios, de ver una Iglesia que abre su Corazón y da de si misma.

Ser asesor edl Movimiento de Jornadas, es tener el privilegio de servir a Dios cumpliendo su voluntad en el anuncio y en el testimonio. Cada experiencia, encuentro, taller es sentir como los sueños jovenes son recreados en el pincel delicado de la Gracia.

La Providencia quiso llamarme y el "Sí" fue veloz. Doy Gracias a Dios por tantas vivencias delante del Sagrario, en la Eucaristía, en las charlas dadas y oídas. Le ruego al Señor que la semilla que cae en tierra tenga la valentía de morir para dar nueva vida.

Por aquellos que prepararon el camino, y por los que hoy en parte cosechamos. Por el futuro puesto en manos de María; simplemente...

Gracias Señor!
Pbro. Sebastián Soto.

6 de noviembre de 2007

Los 30 años..

Los 30 años del Movimiento de Jornadas de Vida Cristiana en nuestra Diócesis..

Las dificultades pastorales y las crisis forman parte del andar de la Iglesia, en distintas épocas y circunstancias, y en todos los estamentos de su vida. EL Espíritu actúa sobre el componente humano del Cuerpo místico de Cristo, pero no suprime sus imperfecciones. La tarea de quienes tenemos fe es crecer en la apertura a ese mismo Espíritu, para discernir medios y formas que conviertan la crisis en materia de crecimiento.
Éramos jóvenes sacerdotes aun (1977), el P. Roberto Toledo y yo, cuando fuimos invitados por quien era nuestro Obispo, Mons. Antonio Quarracino, para buscar medios pastorales adecuados frente a las propias crisis en la pastoral juvenil de la época. Ambos, teníamos experiencia de trabajo en equipo, también en otro movimiento evangelizador para la adolescencia, además de compartir una honda amistad sacerdotal (que perdura).
Salimos a los caminos... por decirlo así. Y frente a varias y distintas propuestas tomamos conocimiento de la existencia de Jornadas. Con un grupo de jóvenes de Avellaneda, especialmente “seleccionados”, vivimos la experiencia en la diócesis de Lomas de Zamora, en cuyo seno se había iniciado diez años antes. Tuvimos el regalo de Dios de conocer directamente a los fundadores, el P. Adolfo y el P. Adán que junto con un excelente equipode muchachos, no sólo nos transmitieron la fuerza del acontecimiento de Gracia, sino que también nos enseñaron a usar el método, respetando la escencia y finalidad, y a largarnos poco tiempo después a iniciar el Movimiento en nuestra Diócesis.
Fue tiempo de esfuerzo, oración y palanca redoblados, y de trabajo a full; porque había que empezar con todo de cero. A los jóvenes que vivieron su Jornada con nosotros, se le sumaron dos jornadistas de Lomas de Zamora. También pedimos y recibimos la ayuda de un grupo de jóvenes que habían vivido ya la experiencia de Cursillos de Cristiandad en nuestra Diócesis. De hecho, los exteriores de las primeras Jornadas fueron servicio generoso e inolvidable de Cursillistas locales. Varios de ellos ya están en la casa del Padre, y estoy seguro que siguen rezando por Jornadas con el mismo cariño fiel con que se sumaron, desde un comienzo a la patriada hasta el final de sus vidas. La clausura de la 1ª de varones, contó casi como únicos jornadistas participantes de la fiesta, a los que acababan de vivirla!
Han pasado 30 años y Dios ha querido que no faltaran sacerdotes y jóvenes laicos , chicas y muchachos, apostólicos, que trajeran hasta aquí la llama viva que se encendió en aquel origen, lejano en el tiempo pero tan actual en lo inolvidable de su vivencia. Demos gracias a Dios. Y que María, Madre de la Juventud, siga siendo estrella que brille y haga brillar los colores de la Gracia en la juventud de nuestros días, a través de este maravilloso instrumento, con todas las adecuaciones, transformaciones y adaptaciones, que el mismo Señor inspire a quienes tienen la responsabilidad y el honor de su continuidad, para que el Cristo joven se haga carne en la vida de tantas y tantos que necesitan de su plenitud para bien de la Iglesia y de la sociedad.

Mons. José J. Correia

5 de noviembre de 2007

Palabra de Vida de Noviembre..

"Amor de Discípulos, Espíritu de Misioneros"

Mensaje de Pentecostés de Mons. Rubén Frassia, Obispo de Avellaneda-Lanús, a los jóvenes de la Diócesis (26 de mayo de 2007).

Hoy, en esta Solemnidad de Pentecostés, celebramos y recibimos la fuerza del Espíritu Santo. Hoy nace definitivamente la Iglesia. Hoy Cristo, que ya ha ascendido al cielo, nos envía, junto al Padre, el Espíritu. En este mismo Espíritu, se nos comunica irrevocablemente la presencia de Dios hasta el final de los tiempos.
Nosotros somos sus discípulos y sus amigos, a quienes Cristo confía su Obra.
Su Obra es que vivamos y transmitamos a los demás su amor, que es victoria sobre el pecado y sobre la dramaticidad de la muerte.
Esta presencia del Padre y del Hijo en el Espíritu sin duda es una realidad impactante, gozosa, pero también nos hace tomar conciencia de nuestra pertenencia al Pueblo de Dios. La Fe, que es una adhesión personal, debe incidir también en todas las esferas de nuestra vida social.
Frente a un don tan grande como es el Espíritu Paráclito, quizás nos asustemos considerando nuestra propia fragilidad. La debilidad es una realidad del hombre, pero no es, ni debe ser, un obstáculo para permitir que Dios viva, talle y transforme nuestro corazón y nuestras actitudes. Estamos en sus manos.
En la medida en que nos dejamos impregnar por el Espíritu, el Amor de Dios nos irá transformando y nos permitirá superar nuestras dificultades. El Amor de Dios, la Fuerza del Espíritu, no ayudará a transformar todo aquello que en nosotros sea individualista, egoísta, superficial, pasatista; y nos fortalecerá para vivir confrontando todo lo que el mundo tiene de consumismo, de subjetivismo y  de visiones fragmentarias. El mundo muchas veces nos lleva a reducir nuestra vida al propio gusto, a lo que uno siente a cada instante, a depender de las ganas para tomar una decisión, a preocuparse sólo por el presente sin tener ningún proyecto de vida. De este modo, terminamos convirtiéndonos en rehenes y cautivos de ideologías que no tienen entidad ni menos futuro.
¡Pensar que para muchos jóvenes entrar en el “Gran Hermano” es un gran sueño! ¡Salir en televisión, exponer sus intimidades a los ojos de lo demás, degradarse siguiendo las pautas que ponen para sacar lo más bajo del hombre! ¿Y todo para que una empresa gane fortunas a bajo costo? ¡Por favor!, tomemos conciencia y sepamos apartarnos con decisión de todo lo que nos hace daño.
Pensemos, más bien, aunque no salga en la televisión, en qué calidad de vida queremos tener y en cuáles instrumentos pondremos en acción para alcanzarla.
Hoy más que nunca necesitamos del Amor de Dios. Y justamente hoy el Espíritu viene en nuestra ayuda. Dios es fuente de amor; de Él debemos nutrirnos.
Tenemos la oración, la Palabra de Dios y la Eucaristía. Si realmente nos nutriéramos de ellas cotidianamente, no solo nos fortaleceríamos, sino que también nuestra vida crecería en muchas direcciones, permitiéndonos vivir una  vida integrada, compacta y ágil.
Tendríamos en nuestro espíritu el criterio del necesario discernimiento que debemos realizar frente a los diversos estímulos que nos propone el ambiente en que vivimos. Dicho de otra manera, ustedes mismos podrán conducir  su vida, sin venderla, permítanme la expresión, por dos pesos.
Finalmente, quiero hacer una última consideración: el amor de Dios, el Espíritu, nos hace descubrir que tenemos una misión. La fuerza de la misión se sostiene en una vocación asumida y convencida. ¡Cada uno de ustedes tiene una vocación humana y cristiana al mismo tiempo! Estar a la altura de nuestra misión requiere de un aprendizaje laborioso, que exige de nosotros esfuerzo, perseverancia, discernimiento, prudencia, compromiso, creatividad y generosidad. En la medida en que esté clara la finalidad, los medios se ponen más fácilmente.  ¡Jóvenes, ustedes son el futuro y la esperanza de la humanidad! Como dice el Papa Benedicto XVI. Lo serán si viven convencidos del Amor de Dios, que está presente en todo acontecer humano, en lo personal y lo familiar, en lo amical y lo social, en lo laboral y lo intelectual, en el tiempo libre y en la diversión.
Sean “testigos de la caridad”. Compartan entre ustedes esta experiencia y díganle al mundo que el amor es la razón más importante para vivir, para madurar y para crecer. El reino del mal y sus seguidores, les propone un mundo que no tiene referencia directa a Dios, quitándoles la posibilidad de vivir en el Amor, que es la fuente de todo amor humano y el fundamento de una verdadera fraternidad
social.
Que hoy recibir al Espíritu Santo nos dé la fuerza para ser, como lo fueron los primeros discípulos, revolucionarios del Amor de Dios. Asumamos el compromiso de ser discípulos. Recuerden que se debe reconocer a los discípulos por el amor que se tienen los unos a los otros (Jn 13,35). No abandonen sus parroquias, sus movimientos eclesiales, grupos juveniles, no abandonen la Acción Católica, ni los grupos misioneros a los que pertenecen. ¡No se vuelvan viejos, vivan como jóvenes! Y si todavía no participan de la Iglesia, comprométanse ahora, pues si se quedan solos no pueden vivir a la altura del Espíritu y corren el riesgo de ser devorados por las falsas propuestas de realización que hoy abundan.
Hoy más que nunca hay que perseverar. Hoy mas que nunca hay que resistir.
Hoy mas que nunca hay que responder. Acepten de buena gana los sacrificios necesarios para servir y para formarse, den testimonio del amor fiel a Cristo y a la Iglesia anunciando el Evangelio a todos, especialmente a los jóvenes. ¡Jóvenes, sigan actuando como jóvenes, creativos en la caridad, fuertes en la realización del bien, audaces y renovadores en sus iniciativas para contribuir así a la edificación de la “Civilización del Amor”!.
Que nuestra Señora de Pentecostés, por su intercesión y su ejemplo, nos acompañe en el cumplimiento de nuestra Misión.Mons. Rubén Oscar Frassia, obispo de Avellaneda–Lanús

Ave María y Adelante...!
De Colores...!

De los 30 a la eternidad..

El tiempo -realidad inasible- es medida humana que nos permite dimensionar el proyecto de Dios. Contemplar desde la fe el misterio del Amor del Padre, que nos toma y supera, cuando la fe ruda nos hace capaces de aceptar (a veces en luminosidad intangible, a veces en penumbras desconcertantes) su modo divino de hacer lo humano.
Como protagonistas de diversas etapas, es bueno reconocer, con gozosa y serena limitación, que apenas vislumbramos lo inmediato... nos permitimos “imaginar” y “organizar” lo que sigue... hasta que advertimos Quien conoce la totalidad, y va -con y por nosotros- en huellas de lo definitivo.
Toda historia comienza con datos cronológicos. Está bien. Es de buena gente no olvidar: ni el pasado, ni a quienes, de tan diversos y quizá desconocidos modos, hayan sido terreno fecundo para recoger, hoy y aquí, frutos maduros. Y para seguir seguir calando surcos.
Pero... la página actual merece ser inicialada con una sola y repetida alabanza: POR CRISTO, CON EL Y EN EL, A TI, DIOS PADRE OMNIPONTENTE, EN UNIDAD DEL ESPIRITU SANTO: TODO HONOR Y TODA GLORIA, CON MARIA. Por los siglos de los siglos.
Entonces todo queda abarcado, incluido, sacralizado. Entonces no se hace mero recuerdo, sino que se celebra el Don. Así, cada nombre, cada persona, cada circunstancia, se hace Eucaristía, que es Acción de Gracias, que es convergencia y proyección, que es fuente de la que todo dimanó y a la que todo confluye y se hace eternidad, por donde la persona (hombre / mujer) va realizando el Plan de Dios (cristiano) mientras madura su talla y vocación (santo), y construye la tierra nueva (apóstol). Así, cobra identidad la exigencia de comunión, el honor del discipulado, el privilegio de la misión para todos y cada uno. Porque “Si para llevar a cabo el desarrollo se necesitan técnicos, cada vez en mayor número, para este mismo desarrollo se exige más todavía pensadores de reflexión profunda que busquen un humanismo nuevo, el cual permita al hombre moderno hallarse a sí mismo, asumiendo los valores superiores del amor, de la amistad, de la oración y de la contemplación” (Pablo VI – Populorum Progressio, 20).

1977 – 2007: hasta aquí llegamos.
Hacia ALLÁ vamos. ¡TODOS! Los que organizaron la fiesta; los que concientes o no, alguna vez –seguramente sin imaginarlo- la “causaron”, los que sólo guardan recuerdo borroso, los que hoy tienen la posta, los que pendulan en la orilla de la vida y de la fe pero nunca podrán arrancar de sus almas la “marca”, los que le meten garra, empuje y compromiso para que la Gracia actual sea actuante, los que con menos fuerza y menos camino por recorrer enjugan sus rostros conmovidos mirando hacia atrás, los que estamos, y los que -como +Ely- le dan melodía de cielo a nuestro vibrante DE COLORES en esta bendecida tierra, que parece hacerse más promisoria como antesala de la eternidad.

roberto m. toledo b.
Jornadas 43 de Lomas de Zamora y 1ª de Avellaneda

4 de noviembre de 2007

Ha llegado lo nuevo..

El que vive en Cristo es una criatura nueva. Lo viejo ha pasado, ha llegado lo nuevo.
2 Cor 5,17
Queridos Hermanos en Cristo Jesús.
Hace 30 años atrás me invitaron a realizar la 1º Jornada de mujeres.
Les quiero contar ¡Cómo transité este camino!
Pasaba mi juventud con mi amiga Raquel ¡Muy alegremente!, sin compromisos, sin obligaciones, muy a prisa, queriendo llenar la vida con momentos de diversión y aspirando a tener cosas materiales. Me gustaba la buena pilcha, perfumes, maquillajes, salidas en fin…. ¡Como ven… “Una buena máscara”!.

No me di cuenta que para mis viejos y mi hermano este modo de vida no era la ¡Felicidad! . Ellos habían conocido otro Camino, el de la Verdadera Felicidad. Su felicidad era distinta, porque Cristo contaba con ellos y ellos con su Gracia.
La que no se transita con bombos y platillos. Vivir dándole un sentido a la vida-. como diría Víctor Frankl.
!Bueno!. Una tarde con matecitos de por medio y sin mucho protocolo nos dijeron (a Raquel y a mi) que pidamos en el trabajo jueves y viernes para hacer el “Famoso Retiro” del cual la ficha estaba presentada.
Yo no quería hacerla porque sabia que un retiro espiritual implicaba un compromiso y realmente estaba muy cómoda sin ellos. En mi cabeza de joven pensaba que haciendo la jornada no iba a poder divertirme como lo venia haciendo; pero para complacer a mis viejos la hice, -¡no me quedó otra!
Me llevaron de las orejas hasta la puerta de Madre del Silencio para que la viva junto con mi amiga Raquel.
Este retiro me marcó.
Conocí a Cristo, al Cristo vivo, al amigo que nunca falla aunque a veces le he fallado. Mi vida con la presencia de Cristo se transformó , puedo decir que a partir de ahí …-soy una criatura nueva, lo viejo a pasado, ha llegado lo nuevo.
Ahora si tengo la Felicidad plena, porque Cristo cuenta conmigo y yo con su Gracia. Viviendo en su presencia a pesar de las dificultades de la vida, que no son pocas.
Cada día es renovar el compromiso que hice hace 30 años; de serle fiel a Dios y a lo que el nos propone.
Jesús es el motor, y el combustible es la Eucaristía, la oración, la confesión…lo que hizo posible que en estos 30 años pueda vivir mi 4to día ¡¡De Colores.!!

Gracias…. por ser parte de mi 4to día.

¡Ave María y Adelante!

Rosita Lucio
1º Jornada

3 de noviembre de 2007

Hemos creído en el Amor de Dios..

A lo largo de los siglos, el cristianismo se ha comunicado y se ha difundido gracias a la novedad de vida de personas capaces de dar un testimonio eficaz de amor, de unidad y de alegría. Precisamente esta fuerza ha puesto en "movimiento" a tantas personas generación tras generación. Jornadas de Vida Cristiana sigue siendo, en medio de nuestra Iglesia Diocesana, parte de esa fuerza, buscando que el joven tenga la experiencia mas maravillosa de todas: la de encontrarse con el Amor, la Belleza, la Verdad, la Plenitud: encontrarse con Cristo.
Celebramos 30 años de vida. Momento especial para: dar gracias por todo lo recibido, por lo mucho o poco que hemos podido dar, para pedir perdón porque no siempre respondimos a la Gracia con generosidad, porque nuestro testimonio cristiano no ha sido profundo, creíble, comprometido… Pero también para mirar el hoy y buscar, con creatividad, como responder a los desafíos que este tiempo nos presenta. La realidad cambia rápidamente y a veces no nos damos cuenta: la indiferencia y la increencia práctica lleva a vivir ‘como si Dios no existiera’, neopaganismo que idolatra los bienes materiales, los beneficios de la técnica y los frutos del poder, la búsqueda de la felicidad se reduce a un deseo de prosperidad material y a la satisfacción de los sentimientos, la competencia despiadada, el placer individual. Sin embargo el hombre y la mujer de hoy siguen buscando la felicidad… Nosotros sabemos que es a Cristo a quien se busca cuando se anhela la felicidad. Aunque la realidad parezca enferma, hostil o apática, necesita de El. Nosotros “Hemos creído en el amor de Dios, nos dice el Papa Benedicto en la Encíclica Dios es Amor, así puede expresar el cristiano la opción fundamental de su vida. No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva.”. Jornadas nos permitió llegar a este encuentro, que embelleció nuestra vida y la hizo florecer otra vez, pero no solos, sino junto a los hermanos, en la Iglesia, nuestra casa.

El desafío que Jesús nos propone es grande. El Movimiento esta llamado a la aventura de remar mar adentro y tirar las redes en el nombre del Señor, con el entusiasmo y la alegría de los que 30 años atrás empezaron el camino. Hoy nos toca a nosotros gritar a viva voz: "Quien deja entrar a Cristo no pierde nada, nada –absolutamente nada– de lo que hace la vida libre, bella y grande. ¡No! Sólo con esta amistad se abren las puertas de la vida. Sólo con esta amistad se abren realmente las grandes potencialidades de la condición humana. Sólo con esta amistad experimentamos lo que es bello y lo que nos libera. ¡No tengan miedo de Cristo! Él no quita nada, y lo da todo. Quien se da a él, recibe el ciento por uno. Sí, abran, abran de par en par las puertas a Cristo, y encontraran la verdadera vida." (Benedicto XVI)

Celebremos con espíritu agradecido, con humildad, renovando nuestro entusiasmo y compromiso, para llevar a Cristo un alma y mil más y seguir escribiendo, de la mano de María, esta historia de colores.

P. Gabriel L. Favero